Hace unas semanas os hablábamos de quien lee más distinguiendo a los lectores por su sexo. En este caso os apuntábamos que aunque era cuestión de personas más que de cifras, sí que había una mayor demanda de la lectura convencional por parte de las mujeres. Hoy nos hemos querido acercar a una realidad en la que los libros infantiles de niños pueden o no estar influenciados por el hecho de ser niño o niña.
Dentro del género infantil juvenil, encontramos en un muchas ocasiones que existen un gran número de libros juveniles en los que las protagonistas son niñas y por tanto las portadas de estos libros tienen tonalidades rosadas o moradas ¿quiere decir esto que los libros sobre heroínas no pueden ser leídos por niños? ¿Se trata de una “etiqueta” femenina que a los padres les indica que han de regalarle a sus hijos y que no?
Nuestro acercamiento hacia los libros infantiles, da un paso más allá, porque no nos quedamos solo en lo que nos muestran las portadas, sino que en muchas ocasiones los propios libros de situaciones cotidianas, o los libros de pinta y colorea, vienen cargados de situaciones sexistas, que nuestros hijos simplemente asimilan de manera indirecta para posiblemente repetir una y otra vez los roles de nuestra sociedad.
Ahora bien, la industria del libro, nos indica algo y es que no son ellos los que quieren imponer un determinado hábito de compra, sino que nosotros los lectores somos quienes reclamamos los libros que se indican especialmente para niños y los libros que se indican especialmente para niñas.
Los niños han de comenzar a pensar por sí mismos, con ayuda de nosotros los adultos pero nunca hemos de marcarles estrictamente el camino. Es perfectamente normal que un niño se pueda interesar por libros donde la protagonista sea una niña, o que a una niña le entusiasmen los libros de super héroes tradicionalmente leídos por el género masculino.
Aquí queda nuestra reflexión, pero como siempre, queremos conocer vuestra opinión ¿qué pensáis de la diferenciación de los libros infantiles por sexos?