Si eres un emprendedor dispuesto a llevar a cabo su propio negocio, deberías plantearte una serie de cuestiones antes de lanzarte a la piscina. Emprender es una tarea apasionante y llena de ventajas, ¡adelante!

1. ¿Qué problema resuelve tu idea, producto o servicio? ¿Cubre alguna necesidad que no esté cubierta aún?

2. ¿Tu idea de negocio es algo nuevo, o una reinvención de algo ya existente?

3. ¿Cómo es la situación actual del mercado de tu idea? ¿Hay competencia? Si es así, ¿qué ventajas tiene tu idea sobre las de la competencia? Tienes que saber transmitir a tu target por qué deberían comprar tu idea en lugar de cualquier otra.

4. ¿Cuál es tu target? Define tu público objetivo, así como su tamaño, y el territorio en el que vas a actuar.

5. ¿Qué criterios de compra tienen tus clientes? ¿Y los consumidores? Tu producto/servicio debe adecuarse a ellos.

6. ¿Qué limitaciones y riesgos tiene tu idea?

7. ¿Cuáles son las ventajas o beneficios que aporta tu proyecto?

8. ¿Cuál es tu canal de venta? ¿Vas a vender online, o en una tienda física? ¿Cómo van a poder adquirir tus clientes el producto o servicio que les ofreces?

9. ¿Cuál es tu plan de negocios? Es mejor que no improvises, planifica las cosas con tiempo, teniendo en cuenta todos los factores, y tus resultados serán mucho mejores.

10. ¿Cuáles son tus opciones de financiación? Hay negocios que requieren una menor inversión, como por ejemplo las franquicias, pero si vas a necesitar invertir mucho dinero es importante que sepas de dónde va a salir éste, si lo tienes o si necesitas inversores.

11. ¿Cómo vas a conseguir ingresos y beneficios?

12. ¿Pagarán tus clientes por tu idea, o buscarán otra sustituta?

13. ¿Qué costes deberás asumir?

14. ¿Estás comprometido con el proyecto? Es necesario que tengas ilusión, ganas de trabajar y una alta motivación. Esto te ayudará a afrontar un nuevo desafío con buena cara y solucionarás tus problemas mucho antes.

15. ¿Sabrías explicar tu idea a posibles socios o inversores?