La novela Nada que no sepas, es una propuesta en la que confluyen dos momentos históricos dentro de dos países diferentes, con sus culturas tan parecidas y diferentes. Una historia en la que su protagonista decide volver al lugar de inicio, con la intención de reconstruir una historia que guarda en lo más profundo de su ser, ya que solo tiene vagos recuerdos de ello.

En esta novela, se nos invita a reflexionar sobre todos aquellos sucesos de nuestro pasado, transcurrido en la niñez, los cuales terminas por convertirse en trampa de nuestros recuerdos. Esos flashes que tenemos de lo vivido y que llegan a nuestra mente, haciéndonos dudar si lo soñamos o si es un recuerdo real o quizás, si se sucedieron en distintas oportunidades o por el contrario, solo pasaron una sola vez.

La lectura es una opción para el lector de pensar sobre cómo el ser humano reinventa hechos ocurridos en la infancia. También sobre cómo modificamos nuestros recuerdos para asumirlos de forma adaptada a las emociones que poseemos en nuestro presente.

Un lenguaje sencillo que concede una lectura amena y narra una historia con profundidad en cuanto a emociones. Se mezclan personajes sólidos, con distintas características que fan fuerza a la historia. Varias tramas sentimentales que confluyen sin conceder el equilibrio que busca la protagonista, una conduce a la otra.

La protagonista consigue excavar sus recuerdos, reconstruye aspectos importantes de la vida de su pasado y consigue descubrir la realidad que al final, dista mucho de los recuerdos que ella se había creado para continuar.

En plena crisis de pareja, la narradora de esta novela vuelve al episodio que marcó el final abrupto de su adolescencia y de los años más felices de su familia: la muerte inesperada de su madre en un desconocido Uruguay de finales de la década de los sesenta, cuando nada, aparentemente, turbaba una vida que transcurría entre fiestas elegantes al aire libre, días en la playa o animadas celebraciones. Obsesionada por aquel final, la protagonista regresa, muchos años después, al reencuentro con amigas de la infancia, con las mujeres que  conocieron a su padre, fascinante y seductor, y con aquellos que puedan contarle por qué ella y su hermano tuvieron que partir para España apresuradamente tras el fallecimiento de la madre.