Hoy queremos enseñaros una historia costumbrista que resalta el valor de las pequeñas cosas, la familia, la tradición, la vida del barrio de toda la vida y los sacrificios que hacemos los unos por los otros para que la gente a la que más queremos no sufra. Se trata de “Los besos en el pan” de Almudena Grandes, un libro sobre tiempos difíciles con el que muchos os sentiréis identificados. 

Almudena Grandes es conocida por dos cosas: La primera de ellas es su talento, la segunda es la capacidad que tiene para hacer brillar cualquier tema o elemento que en manos de cualquier otro autor pasaría desapercibido. 

Y de eso trata “Los besos en el pan”, de una familia que regresa de sus vacaciones intentando por todos los medios que su rutina diaria no cambie pese a los palos que les da la vida. Un hombre divorciado que llora tras una pared, una abuela que adelanta la decoración de Navidad con la intención de levantar el ánimo de la familia, una mujer que regresa al campo para empezar de cero y darse la oportunidad de rehacer su vida.

En escenarios corrientes, pero no por ello poco interesantes, el lector recorrerá las andanzas de estos personajes a través del bar, el centro de salud, una oficina, una peluquería o una conversación con un vecino. Situaciones que todos vivimos en el día a día y que nos harán volar a la par que esta familia. 

Uno de los puntos que más nos han gustado de “Los besos del pan” es que recupera elementos de generaciones anteriores, como la costumbre de darle un beso al pan. Un gesto que hoy en día consideraríamos ridículo pero que en tiempos difíciles donde la guerra, el hambre y las penurias eran la norma tiene un significado muy especial.

¿Todavía crees que no tienes nada que aprender de tus abuelos?