La prelectura se puede definir como el proceso de preparación que un lector desarrolla, como paso previo a la lectura de un texto de forma detallada. Las distintas técnicas que se utilizas, tienen relación con las actividades que llevas a cabo en tu día a día. Antes de adquirir un libro se debe analizar para saber qué estamos comprando.
Es una lectura general y rápida del tema. La prelectura es la primera etapa que comprende el proceso de la lectura y tiene como finalidad facilitar el aprendizaje. Esta herramienta tiene como propósito identificar la ideal general que se plasma en el texto a leer, identificando así, el tema principal del texto y los temas secundarios.
Al desarrollar la prelectura, se busca identificar el tipo de texto, el tipo de lectura que realizaremos y cuál es el objetivo de la lectura, teniendo en cuenta el tema principal y la organización del texto. Así podremos predecir el contenido que nos encontraremos y planificaremos mejor el proceso de lectura.
PASOS DE LA PRELECTURA
Existen unas pautas recomendadas para realizar una buena lectura global antes de leer un libro y son las siguientes:
- Revisa la portada y la contraportada, fíjate en los detalles en imágenes y texto.
- Leer el índice y el prólogo, con esto irás teniendo una idea sobre la temática principal del libro.
- Lee con especial atención los títulos y subtítulos, así podrás ir viendo la estructura que tiene el texto.
- Identifica las negrillas. La información que se resalta te puede aportar información valiosa.
- Haz una revisión completa de las imágenes, gráfico o esquemas que pueda contener el libro.
- Revisa en cuál lugar y año se escribió el libro
- Lee la información sobre el autor del texto.
Uno de los principales objetivos de esta técnica es tener conocimiento previo a lo que puedes llegar con la lectura y encontrar así, la motivación necesaria para terminarlo. Una lectura informativa se realiza ya sabiendo para qué se lee. Esto, te permitirá entender el contenido del texto y fomenta una mejor comprensión.
Hay distintas maneras de llevar a cabo la prelectura. Puedes hacerlo leyendo un fragmento o bloque del libro, seleccionado de forma previa. Otra manera es realizar una lectura en “zigzag” en la que lees por frase y reduces la cantidad de veces que tus ojos se detienen en una cada línea y por último, puedes realizarla leyendo el inicio y final de algunos párrafos. Esto te facilitará el encontrar palabras claves, enlazar ideas y obtener la información necesaria para decirte a la lectura detallada del libro.